EL CANCER DE CUELLO ES PREVENIBLE
El cáncer de cuello uterino es prevenible gracias a la vacuna y a los estudios ginecológicos de rutina. Y es altamente probable que te cures si se descubre a tiempo.
El VPH (Virus del Papiloma Humano) es la infección genital más frecuente que existe. La presencia de este virus es un factor imprescindible para el desarrollo de las lesiones premalignas y malignas de cuello uterino. Pero su sola presencia no determina que si o si vaya a ocurrir un cáncer.
¿Qué es el VPH?
El VPH (Virus del Papiloma Humano) pertenece a una familia de virus que puede afectar piel y mucosas de la boca, área genital y anal.
Es la infección genital más frecuente que existe ya que se trasmite fácilmente. Se calcula que un 80% de la población va a contraer alguno de los tipos de VPH en algún momento de sus vidas. El VPH genital se transmite por contacto directo de piel con piel durante las relaciones sexuales.
Existen VPH de bajo riesgo que producen lesiones transitorias que se eliminan solas y no evolucionan a lesiones malignas y los VPH de alto riesgo que pueden llegar a
provocar alteraciones en las células, generando lesiones premalignas que con el tiempo pueden convertirse en cáncer.
Pero tener VPH no significa que necesariamente se van a producir lesiones o un cáncer de cuello uterino. Solo un porcentaje muy pequeño de las pacientes que tienen una infección por VPH no lo elimina y tienen más riesgo de desarrollar cáncer.
El VPH también puede producir cáncer de boca, garganta, ano y pene, pero estos canceres son poco frecuentes. El más frecuente es el de cuello uterino.
Es fundamental realizar los controles periódicos para poder detectar las lesiones tempranamente y así poder prevenirlo o tratarlo en estadios iniciales.
La prueba del VPH (Virus del Papiloma Humano) y la prueba de Papanicolaou (o PAP) pueden ayudar a prevenir el cáncer de cuello uterino o a encontrarlo en etapas iniciales.
¿Cuándo se realizan estas pruebas?
Se recomienda iniciarlas a los 3 años del comienzo de la actividad sexual en toda persona con cuello uterino. En algunos casos, si su médico lo considera, se puede comenzar antes.
Si tiene menos de 30 años
Debe comenzarse a realizar la prueba de PAP. Si los resultados de su prueba son normales su médico la guiará para saber cuál es el intervalo correcto para la próxima muestra.
Si tiene más de 30 años
Hay dos modalidades recomendadas:
- Prueba del VPH.
- Prueba de PAP.
La prueba del VPH y la prueba de PAP ayudan a prevenir el cáncer de cuello uterino o a encontrarlo en etapas iniciales. Los resultados de las pruebas pueden tardar algunas semanas.
- La prueba del VPH busca el virus (virus del papiloma humano) que puede causar una lesión premaligna o maligna del cuello uterino. La presencia de estos virus es un factor imprescindible para el desarrollo de las lesiones. Pero su sola presencia no determina que si o si vaya a ocurrir un cáncer de cuello uterino. Muchas personas pueden tener la infección y nunca desarrollar la enfermedad. De hecho, lo más frecuente es adquirir la infección y resolverla con el tiempo, por acción del sistema inmune.
Un resultado NEGATIVO implica ausencia del virus y, por lo tanto, un riesgo cercano a cero de desarrollar una lesión premaligna o maligna en los siguientes 5 años.
Un resultado POSITIVO implica la presencia de algunos tipos de riesgo. No significa lesión o enfermedad. En este caso es necesario más estudios, como PAP, colposcopia y en algunos casos biopsia del cuello uterino.
- La prueba de PAP (Papanicolaou o citología vaginal) busca las lesiones pre-malignas o malignas producidas por el virus
Un resultado NEGATIVO significa que no se detectaron cambios en las células en su cuello uterino.
Un resultado ANORMAL significa que se detectaron cambios celulares en su cuello uterino. Es probable que los cambios anormales sean ocasionados por el VPH. Estos cambios pueden hacer sospechar de una lesión premaligna o maligna del cuello uterino. La mayoría de las veces, los cambios leves regresan a la normalidad por su propia cuenta. No obstante, los cambios más graves pueden convertirse en cáncer si no se realiza tratamiento. Usted necesitará otras pruebas para asegurarse. Mientras más pronto se detecte el cáncer de cuello uterino, más fácil será tratarlo.
¿Cómo prepararse para la prueba?
Si se va a hacer una prueba de PAP, evite tener relaciones sexuales, hacerse duchas vaginales o usar medicamentos vaginales (como óvulos, por ejemplo) durante los 2 días anteriores a la prueba.
Para hacerse una prueba del VPH, solo se necesita no estar menstruando en el momento de la toma, ya que el sangrado puede invalidar la muestra.
Si tuvo relaciones sexuales o esta menstruando, concurra al turno según lo planeado y dígaselo al médico.
¿Para qué sirve la colposcopia?
La colposcopía es un examen en el que se observa de cerca el cuello del útero. Para ello, se utiliza un instrumento especial con una lente de aumento. El instrumento también se puede usar para observar la vagina y la vulva.
Sirve fundamentalmente para identificar lesiones y dirigir la biopsia para confirmar un diagnóstico.
Por lo general, cuando la prueba de VPH o el PAP son anormales, la colposcopia nos permite ver si hay alguna lesión y tomar una muestra de ese lugar.
La vacuna contra el VPH protege contra los tipos de VPH que causan el cáncer de cuello uterino, vagina y vulva.
¿Cuándo se recomienda la vacuna?
La vacunación se recomienda y se encuentra incluida en calendario para niñas y niños de 11 años (puede comenzar desde los 9 años).
También se recomienda para todas las personas hasta los 26 años, si es que aún no se han vacunado.
No hay recomendaciones sobre la vacunación contra el VPH para personas mayores de 26 años. Sin embargo, es posible que algunos adultos entre los 27 y 45 años que todavía no se hayan vacunado, decidan vacunarse contra el VPH después de hablar con su médico sobre los beneficios de la misma. La vacunación en este rango de edad proporciona menos beneficios, debido a que más personas ya han estado expuestas a este virus.
¿Cómo es el esquema actual en nuestro país?
- Única dosis a los 11 años.
En caso de no haber recibido la vacuna a la edad correspondiente, la misma está disponible para las mujeres nacidas a partir del año 2000 y los varones nacidos a partir del año 2006 y que tengan menos de 26 años al momento de la vacunación.
En caso de recupero de esquemas atrasados:
- Única dosis de vacuna hasta los 20 años.
- Dos dosis (0 y 6 meses) en caso de inicio de esquema entre los 21 a 26 años.
La vacunación contra el VPH previene nuevas infecciones por este virus, pero no sirve para tratar las infecciones o enfermedades existentes. Esta es la razón por la cual la vacuna contra el VPH es más eficaz cuando se administra antes de cualquier exposición al virus.
Recuerde que usted debe hacerse pruebas de detección de cáncer de cuello uterino con regularidad, incluso si recibió una vacuna contra el VPH.

